AVISO

Este fic contiene sólo especulación. Se basa en diversas teorías que hay por la red. Si no quieres que se te desvele nada que creas importante, no lo leas. Pero insisto: no dice nada que se haya escrito y/o publicado aún. Todos los personajes y lugares pertenecen a G.R.R. Martin.

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Capítulo 19


RHAEGAR
            El jinete había salido tan rápido del lugar de las justas que llevaba demasiada ventaja sobre Rhaegar. El caballo del príncipe era un semental de guerra y él confiaba en que pronto alcanzaría a la montura del Caballero del Árbol Sonriente, ya que no se veía un animal demasiado brioso. Parecía que el desconocido había tomado el camino hacia el bosque cercano, seguido por su escudero, que también se esfumó con rapidez sobre un jamelgo. Esperaba estar siguiendo las huellas correctas, porque le daba la sensación de que caballero y escudero se habían separado en algún punto para despistar a su perseguidor.

lunes, 26 de noviembre de 2012

Capítulo 18


EDDARD
            Como era de esperar, Benjen y Lyanna habían amanecido enfermos tras la cena. Ambos se quejaban de dolor de estómago y náuseas y se lamentaban una y otra vez por no haber hecho caso a Bran y a Ned de no comer aquella cosa infame. Robert se ofreció a cuidar de ambos, pero Lyanna se negó rotundamente. No quería que su prometido se perdiera nada del torneo. Además, podían pagar a una de las criadas del hospedaje para que se ocupara de ellos, ya que llevaban dragones de oro como para comprar media docena de caballos. Brandon no puso objeción ninguna, pero Robert y Eddard no terminaban de decidir si ir al torneo o no. «Id, por favor», insistía Lyanna, «Quiero que alguien me cuente todo con pelos y señales, y seis ojos ven más que dos.» Así las cosas, dejaron a los enfermos y se fueron a las justas. 

sábado, 24 de noviembre de 2012

Capítulo 17


RHAEGAR
            Las justas se reanudaron al día siguiente. Rhaegar ocupó su lugar en el palco real junto a su padre y su esposa. Aerys se veía encantado con la jugada de nombrar capa blanca a Jaime, porque así arrebataba a Tywin su joya más preciada: el primogénito de Roca Casterly. Tyrion era el único varón que le quedaba tras convertir a Jaime en miembro de la Guardia Real. Rhaegar pensaba en lo amargado que debía estar su padre para hacer algo tan rastrero… Por lo que había oído, la Mano había dejado el cargo unos días después de la marcha de la familia real a Harrenhal, como protesta por las intenciones de Aerys. Y ahora, para insultar más a los Lannister, había ordenado al flamante capa blanca volver a Desembarco para proteger a la reina y al pequeño Viserys, impidiendo que Jaime participara en las justas. Rhaegar sentía cada vez más vergüenza por los actos de su padre. Eso le recordó la misiva anónima que recibiera unas semanas antes. Nadie se había puesto en contacto con él y empezaba a sospechar que tampoco lo haría. Todo tenía el halo de Varys: el misterioso mensaje, el apoyo de gentes que no decían sus nombres y el hecho de que su padre abandonara el encierro voluntario para desplazarse a Harrenhal. Pero, ¿cuál era el propósito de Varys? ¿Desequilibrar aún más al rey? A lo mejor él era el cabecilla de un grupo de personas que realmente veían el deterioro de Aeyrs y apostaban por Rhaegar para ocupar el Trono de Hierro antes de que los Targaryen cayeran en desgracia. Alimentar las manías y locuras de su padre no harían sino hacer más evidente la necesidad de un cambio… Era una estrategia bastante inteligente, y era innegable que Varys sabía cómo moverse en la sombra. Pero todo eso no eran más que conjeturas.

viernes, 23 de noviembre de 2012

Capítulo 16


LYANNA
            Finalizaba ya el primer día de torneo. A Lyanna le pareció algo aburrido, aunque ver perder a los hijos de Lord Whent frente a cuatro caballeros de segunda categoría le hizo reír por dentro. El pomposo señor de Harrenhal sufrió un golpe en su orgullo, lo que le divertía. No soportaba a la gente que se creía superior a los demás. Para completar el tedioso día, los tres caballeros cuyos escuderos atacaron a Howland Reed ganaron sus respectivos combates. Nada era como ella esperaba… Pero al menos tenía el aliciente de ver de nuevo al príncipe. Mientras se celebraban las competiciones de esa jornada, Lyanna no podía resistir la tentación de mirar de vez en cuando hacia el palco real. El joven estaba siempre acompañado de su esposa embarazada y de su horrible padre. Entre ellos, Rhaegar destacaba por su belleza y porte. Tenía además una expresión tan dulce y melancólica a la vez que despertaba en Lyanna el deseo de abrazarlo y darle cobijo. Era como si desprendiera un perfume cargado de tristeza que la atrajera irremediablemente.

jueves, 22 de noviembre de 2012

Capítulo 15


EDDARD
            Era el primer día de justas en Harrenhal. Como mandaba la tradición, la hija de Lord Whent fue coronada Reina del Amor y de la Belleza en la inauguración. Cuando el torneo finalizara, el ganador sería el encargado de elegir a la nueva Reina entre las muchachas asistentes. Los Stark no participaban en las justas; sólo Robert Baratheon iba a hacerlo, aunque en nombre de Bastión de Tormentas, en una lucha cuerpo a cuerpo, a la manera antigua. Brandon había traído su armadura y armas por si en el último momento se animaba a justar. Eddard tenía muy claro quién sería su Reina de haber intervenido: Ashara. Y todo a pesar de que la noche antes se había ido con su hermano. Esa mañana, Eddard pidió explicaciones a Brandon. Éste le dijo que no había ocurrido nada que ninguno de los dos no hubiera querido. La respuesta era algo ambigua, pero poco podía hacer ya. Además, había oído que uno de los participantes, Ser Barristan Selmy, aun siendo miembro de la Guardia Real, había dicho que coronaría como Reina a Ashara Dayne si ganaba el torneo. Estaba visto que la competencia era demasiada, así que sólo le quedaba contemplar a la joven a distancia.

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Capítulo 14


LYANNA
La noche era cálida y notaba las mejillas ardiendo. No había bebido vino, pero la velada había sido tan excitante que aún le duraba el efecto. Ned iba muy adelantado; de hecho apenas alcanzaba a saber por dónde andaba. Lo vio salir como  una furia del castillo y no sabía por qué. Robert preguntó por Brandon, pero ni ella ni Benjen tenían idea de dónde estaba. El prometido de Lyanna rió por lo bajo sin que ella entendiera la razón en principio. Luego recordó cómo las jóvenes rodearon a su hermano durante el baile… Y también algunas se acercaron al propio Robert. Lyanna sabía que él había sido un poco mujeriego durante su pupilaje, pero no creía que fuera capaz de serle infiel después de todo lo que había esperado para conseguir su mano. Sin embargo, ella se sentía culpable esa noche, así que no veía bien reprocharle nada a Robert… 

martes, 20 de noviembre de 2012

Capítulo 13


EDDARD
            Faltaba un día para que comenzaran las justas en Harrenhal y Lord Whent convocó a las grandes familias invitadas al castillo para ofrecerles una velada festiva. Los Stark se presentaron de los primeros en el gran salón principal, tan grande que Eddard calculó que allí podrían meterse doscientos caballeros con sus monturas. Poco a poco empezaron a llegar otros invitados al torneo: miembros de las casas Haigh, Frey y Blount; también Mace Tyrell, de Altojardín, Ser Richard Lonmouth, gentes de las casas Mormont, Hornwood… La estancia ya comenzaba a tener vida y el murmullo de las conversaciones invadía el lugar. Entró entonces Lord Whent acompañado de su esposa y tomaron asiento en un lugar central de la mesa principal. El señor de Harrenhal dio unas palmadas y, con un gesto, indicó al guardia de la puerta que anunciara al invitado más ilustre: el rey Aerys II Targaryen. Todo el mundo estaba expectante y Eddard no era una excepción. Había oído hablar del Rey Loco y de su aspecto. Quería ver si esos cuentos eran ciertos o no. Cuando el rey entró, todo lo que había escuchado sobre Aerys vino a confirmarse: las costras, la barba sucia, las uñas largas, la mirada enloquecida. Ned se quedó impresionado ante semejante visión… Sin embargo, cuando entró el que debía ser el heredero, su gesto cambió. Rhaegar era un joven de gran belleza, un Targaryen de los pies a la cabeza, con el pelo plata y los ojos de un raro tono de azul. Su cara irradiaba inteligencia y un punto de melancolía. Junto a él entró la que debía ser su esposa, Elia Martell. Andaba despacio y a Eddard le pareció cansada. Se dio cuenta de que de vez en cuando se pasaba la mano por el vientre abultado. A la princesa la acompañaba un séquito de damas, entre ellas una joven que llamó la atención de Ned: era pálida y con el pelo oscuro, con un rostro seductor. Preguntó a Brandon quién podía ser y éste, entre risas al ver que tenía interés por una chica, le dijo que debía ser Ashara Dayne, hermana del famoso Ser Arthur Dayne, La Espada del Amanecer. Tras los Targaryen entraron los miembros de la Guardia Real, entre ellos el propio Ser Arthur y también el no menos conocido Ser Barristan Selmy, y algunos caballeros jóvenes, entre los que destacaba uno alto y con el pelo como el oro batido. «Un Lannister», pensó Ned. «Será el hijo de la Mano.»

lunes, 19 de noviembre de 2012

Capítulo 12


RHAEGAR
            A Elia parecían no importarle las molestias del embarazo: deseaba con toda su alma salir de la Fortaleza Roja y distraerse y Rhaegar lo sabía. La invitación al  torneo de Lord Whent fue una excusa perfecta para abandonar el encierro al que su estado la tenía sometida y por eso formaba parte del cortejo que acompañaba a Rhaegar. También se unió al viaje Aerys, algo extraño ya que llevaba años sin salir de Desembarco del Rey. Rhaegar sospechaba que su padre había decidido ir a Harrenhal porque Varys le informó del contenido de la extraña nota que recibió hacía unas semanas. No sabía quién la había mandado y estaba expectante por el misterioso encuentro. ¿Y si era una trampa? Debía ser cauto en ese aspecto.

sábado, 17 de noviembre de 2012

Capítulo 11


LYANNA
            Todo era nuevo y excitante. Lyanna nunca había salido de Invernalia y encontrarse ahora en Harrenhal para asistir al torneo era toda una experiencia. Había movimiento por doquier: puestos que ofrecían todo tipo de manjares desconocidos para ella, joyas, telas y hasta lo que decían ser auténticos huevos de dragón, prostitutas que enseñaban su mercancía al paso de los hombres, bardos cantando Un barril de cerveza, una de las canciones favoritas de su prometido… Su hermano Brandon la guiaba por todo aquel gentío, mientras que Ned y Benjen iban detrás. La escoltaban como si fuera una gema preciosa que pudiera ser robada y eso la agobiaba. Pero era normal que se preocuparan. Una muchacha joven corría peligro en un lugar tan atestado como aquél, donde los pícaros, los ladrones e incluso los dueños de burdeles estaban al acecho aprovechando la confusión.

viernes, 16 de noviembre de 2012

Capítulo 10


BRANDON
            Estuvo menos de una semana en Aguasdulces, pero entre el viaje de ida y el de vuelta su ausencia duró casi tres. A su regreso nada parecía haber cambiado, aunque era evidente que Robert era el que más feliz estaba de todos los habitantes de Invernalia. Lyanna había aceptado el compromiso impuesto por su padre con poco entusiasmo, pero sabía que su deber era obedecer lo deseado por Lord Rickard. Todos los hermanos se habían quedado estupefactos ante la decisión repentina de su padre, aunque Robert no era la peor de las opciones. Era un lord, lo conocían desde niño, sentía verdadero amor por la muchacha y ella le tenía mucho aprecio. Al menos la boda no iba a ser inmediata, sino que se esperaría a que Lyanna tuviera dieciséis años. Mientras tanto, Robert seguiría viviendo en Invernalia.

jueves, 15 de noviembre de 2012

Capítulo 9


RHAEGAR
            El embarazo de Elia ya se notaba aunque estaba sólo de cuatro meses. Las molestias constantes la tenían recluida en sus habitaciones y no salía nada más que para dar cortos paseos por recomendación del Gran Maestre Pycelle. Mientras tanto, Rhaenys se dedicaba a jugar con su tío Viserys, que sólo pensaba en travesuras crueles que provocaban en Rhaegar una ira desconocida en él. Parecía que su hermano sólo disfrutaba haciendo sufrir a los demás, de modo que siempre estaba encima de los niños cuando éstos jugaban juntos con el fin de evitar algún accidente grave provocado por las travesuras de Viserys.

miércoles, 14 de noviembre de 2012

Capítulo 8

LYANNA
            Su relación con Robert ya no podría ser igual que antes. Todo ahora era más formal, más serio... ¡Estaba comprometida! Se había divertido mucho, quizás demasiado, coqueteando con él, posiblemente abusando de lo que el joven sentía por ella, y ya no había marcha atrás, no estaría bien desobedecer a su progenitor. Tras el anuncio hecho por su padre, tanto Lyanna como sus hermanos no supieron qué decir ni qué hacer, aunque a ninguno, incluida ella, les pilló realmente por sorpresa. El joven Baratheon ya le había declarado sus sentimientos, pero no creía que su padre fuera a concederle su mano de buenas a primeras. ¿Era una manera de meterla en cintura? Había sido una muchacha rebelde y a lo mejor Lord Rickard entendió que había que domarla a través del matrimonio. Robert era un buen partido y la quería, no cabía duda. Peor hubiera sido casarla con un hombre viejo y horrible que ni siquiera le agradara físicamente. La noche después del anuncio, Lyanna le confesó a su hermano Ned que sabía que Robert había tenido algún bastardo en el Valle. Él intentó convencerla de que todo eso quedaría en el pasado ahora que iban a casarse, que le arrancaría la promesa a su amigo, pero ella no estaba segura de que Robert fuera a cumplirla. No pudo sino sentirse un tanto ofendida por ese tema y así se lo dijo a algunas de sus sirvientas. Ellas le restaron importancia e incluso añadieron que el tener bastardos no era sino una prueba clara de que en un futuro le daría hijos. Lyanna se había sonrojado al imaginarse siendo madre.

lunes, 12 de noviembre de 2012

Capítulo 7


EDDARD
            Los últimos acontecimientos familiares lo tenían confuso, todo había sido demasiado precipitado. Brandon ya había salido hacia Aguasdulces y ahora él se quedaba como la mano derecha de su padre. Por otra parte, Robert estaba henchido de orgullo al haber obtenido la mano de Lyanna. A Ned le sorprendió que su amigo de la infancia no le hubiera confiado algo tan importante. A pesar de que nunca se lo había confesado directamente, el amor de Robert por su hermana era como un secreto a voces, de forma que le dolió en su fuero interno que no le hubiera revelado la idea de pedir su mano. Ni siquiera tanteó el terreno: así era Robert, impulsivo y decidido, y Eddard reconocía que eso lo convertiría en un triunfador en la vida. Él era más inseguro y creía en cosas de las que su amigo se reía, como el honor y la verdad. A Ned no le gustaba que Robert se tomara a la ligera esos principios, y menos ahora que era el prometido de Lyanna, pero sabía que el joven nunca haría nada que pudiera ofender a la muchacha de la que estaba enamorado desde hacía años. O eso quería creer.

sábado, 10 de noviembre de 2012

Capítulo 6


BRANDON
            La mesa estaba presidida por Lord Rickard y a cada lado se situaban sus dos hijos mayores. Desde hacía un mes, Brandon empezaba a entender que su padre trataba de ir delegando algunas de las funciones de señor de Invernalia en él, aunque confiaba en que su progenitor viviera muchos años más. No era un hombre débil, pero iba acusando el paso del tiempo y el señor fuerte y temido empezaba a ser un hombre maduro, respetable y algo achacoso.

viernes, 9 de noviembre de 2012

Capítulo 5


LYANNA
            Hacía dos semanas que Ned y Robert habían vuelto a Invernalia, pero a Lyanna se le habían pasado muy rápido, en parte gracias a la presencia del joven Baratheon. El amigo de su hermano se había comportado los primeros días con la timidez de siempre, aunque después fue tomando una nueva confianza que antes no tenía: a veces la miraba directamente a los ojos, como retándola, y parecía más seguro de sí mismo. 

jueves, 8 de noviembre de 2012

Capítulo 4


RHAEGAR
            Entró en el suntuoso palacio real para tomar un baño después del entrenamiento. Caminaba tranquilamente por el pasillo de los aposentos de la familia cuando un bulto blanco pasó corriendo por su lado, como un rayo. Rhaegar tuvo los reflejos de agarrar a aquello por un brazo: no era sino su hermano pequeño Viserys. El crío tenía casi siete años y, aunque alto para su edad, se comportaba como un bebé caprichoso. Rhaegar se preguntó cuál sería la idea alocada que se le habría pasado por la cabeza ese día. Mientras lo sujetaba con fuerza, Viserys no paraba de patalear, intentando zafarse del fuerte brazo de su hermano mayor, que reía viendo los esfuerzos inútiles del niño. «¡Suéltame!», gritaba Viserys, al tiempo que trataba de agarrar el largo pelo plateado de Rhaegar. «¡Soy de la sangre del Dragón, no te atrevas a despertar al Dragón o sabrás lo que es bueno!» El príncipe aflojó el abrazo un poco, lo que fue aprovechado por Viserys para morderle la mano. Rhaegar no pudo evitar abofetear al pequeño y reñirle su comportamiento estúpido. Viserys se marchó llorando y jurando venganza, al tiempo que repetía que había despertado al Dragón y ardería en su ira. Mientras comprimía la herida sangrante con un pañuelo, Rhaegar no pudo evitar pensar que Viserys parecía haberse contagiado de la locura de su padre. Le quedaba el consuelo de que no era el heredero al Trono de Hierro ni tampoco había ninguna hermana con quien casarlo.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Capítulo 3


EDDARD
            La silueta de Invernalia se dejaba ver entre los árboles y la bruma que rodeaba la poderosa construcción. Los dos amigos venían escoltados por gentes del Valle de Arryn, aunque Robert se había empeñado en que no les hacía falta ningún tipo de protección. Eddard miró de reojo a Robert: se asemejaba a un coloso montado sobre un caballo. Su amigo era valeroso con la espada además de muy diestro, pero pecaba de ser un poco fanfarrón a veces. A pesar de estar cerca de terminar su pupilaje, parecía no entender que aún no era un caballero preparado para ir a ninguna guerra, pero Robert estaba deseoso de demostrar de lo que era capaz en una lucha real. Eddard acercó su caballo y le dio una palmada en la espalda. El joven Baratheon le devolvió la muestra de afecto y lo miró con ojos un tanto ansiosos. Eddard supo interpretar el gesto: Robert estaba nervioso ante la perspectiva de ver de nuevo a Lyanna, la pequeña de los Stark. Ahora se habría convertido en una joven, aunque la última vez que estuvieron en Invernalia ya había experimentado un cambio físico que anunciaba la espléndida mujer que llegaría a ser. «Ned», dijo Robert, «no te burles de mí, pero ahora mismo pararía este maldito jamelgo y saldría corriendo hacia Invernalia. Es tan lento que parece que, en vez de avanzar, retrocede.» Eddard soltó una carcajada, algo raro en él, ya que solía ser bastante comedido y discreto; pero no pudo reprimir esa muestra de buen humor al contemplar la impaciencia de Robert por ver a Lyanna. Conocía a su amigo casi como la palma de su mano. Había algo en él que hacía imposible odiarlo, una especie de encanto natural que atraía a hombres y a féminas. Y eso que estaba plagado de defectos: además de orgulloso, era un poco mujeriego. El Lord Protector tuvo que castigarlo varias veces durante su pupilaje porque Robert se dedicaba a flirtear con las criadas y había desflorado a más de una, y no sin consecuencias. Se decía que una de las últimas niñas nacidas entre la servidumbre del Valle era hija de Robert. Eddard la había visto y, desde luego, la mata de pelo negro que cubría su cabecita parecía dar crédito a las habladurías. Aún así, le parecía que lo que Robert sentía por su hermana era verdadero amor, ya que no se comportaba con ella como con el resto de muchachas. Era como si tratara de refrenarse e incluso quisiera ser todo un caballero con ella, colmándola de atenciones, a veces un tanto torpes, porque no estaba acostumbrado a hacerlo.

martes, 6 de noviembre de 2012

Capítulo 2


LYANNA
            Estaba convencida de que nadie la había visto salir. Madrugar, sentir el silencio de la fortaleza y, sobre todo, respirar el aire frío de la mañana, cuajado de rocío, la vivificaban. Invernalia era su alimento, como lo era para cualquiera que se apellidara Stark. Bajó con cuidado, cruzó el patio de armas y se adentró en las cuadras. Allí estaba su yegua blanca Escarcha, un nombre muy adecuado para el color del animal. A Lyanna le gustaba todo lo relacionado con el invierno y el frío, así que decidió ponerle ese nombre a su montura. Se la había regalado su padre, Lord Rickard, por su decimocuarto día del nombre. Ella se encaprichó de aquella bestia indomable y un poco peligrosa desde que la vio en un mercado de ganado de Invernalia y su padre tuvo que comprársela finalmente. No existía nada en el mundo que él no le diera y a veces reconocía que se aprovechaba demasiado de ser su niña mimada. Sus hermanos le recriminaban que fuera tan blando con ella, mientras que a ellos los trataba con más dureza, pero incluso los tres varones de Invernalia apenas podían resistirse a los encantos de su propia hermana, rebelde y valerosa, toda una Stark.

domingo, 4 de noviembre de 2012

PRIMERA PARTE: LA CORONA DE ROSAS Capítulo 1

 
RHAEGAR
            Bajó al patio de armas de la Fortaleza Roja, ya que era un lugar ideal para entrenarse con la espada, algo que le encantaba; de hecho, era sin duda el mejor y cuando contaba sólo diecisiete años había sido nombrado caballero. Sin embargo, si le daban a elegir entre una lanza y un arpa bien afinada, elegiría esta última sin pensar. Su padre, Aerys II Targaryen, monarca de los Siete Reinos, no estaba muy de acuerdo con las inclinaciones de su primogénito. Rhaegar se consideraba a sí mismo un buen heredero y, aunque no lo decía en voz alta, sabía que llegaría a ser mejor rey que su progenitor. Cumplía con los requisitos que se le exigían a un gobernante: fuerza, astucia, sentido de la justicia y, por qué no, un punto de sensibilidad de la que su padre había empezado a carecer con el paso de los años. Según se rumoreaba, Aerys sufría de una demencia progresiva fruto del secuestro que sufrió durante seis meses en el Desafío de Bosquesombrío. Aerys ya rondaba los cuarenta años y su pelo plateado, tan característico de la familia, se mostraba descuidado y amarillento, la barba aparecía larga y sucia e incluso había prohibido que se le cortasen las uñas. A todo ello se añadían las numerosas cicatrices y heridas provocadas por las afiladas espadas que formaban el Trono de Hierro y que le valían a Aerys el sobrenombre de Rey Costra. El aspecto no era precisamente el que se esperaba de un rey poderoso como él. Rhaegar lamentaba la situación y no veía el momento en el que heredaría el poder.

sábado, 3 de noviembre de 2012

PRÓLOGO. LOS MUROS DE INVERNALIA (Año 276)

 
            A veces sentía que cada vez le costaba más viajar, pero regresaba con el convencimiento de que en esta ocasión había merecido la pena. Tras varios días de moverse a caballo, se dispuso a penetrar por el bosque que le llevaría a su hogar. Ya se divisaba una de las torres del castillo del que era señor, lo que le hizo notar un cálido alivio y las fuerzas renovadas, como si Invernalia fuera una fuente de vida que le hiciera resucitar cada vez que llegaba a sus murallas.

Nieve en Llamas: el inicio de todo

Queridos todos, otro fic da comienzo. Gracias a la confianza depositada en mí por Jefe Maestro, del blog Juego de Tronos en los Siete Reinos, me decidí a contar la historia de Lyanna Stark y todo lo relacionado con la Guerra del Usurpador. Es algo muy diferente a lo que escribí anteriormente, además de mucho más complicado, pero el reto está siendo apasionante. Espero que también lo sea para los lectores.

Como siempre, agradecer a Kahlan89 su apoyo y el diseño de la portada. Y, claro está, todos mis respetos para G.R.R. Martin, creador de los personajes.

Las fuentes consultadas han sido varias: las propias novelas de la saga publicadas hasta ahora, asshai.com y hieloyfuego.wikia.com

Todos los personajes pertenecen a GRR Martin. Este fic es sólo una especulación/recreación. No contiene spoilers, sólo especulaciones basadas en diversas teorías. No contiene lenguaje obsceno.