AVISO

Este fic contiene sólo especulación. Se basa en diversas teorías que hay por la red. Si no quieres que se te desvele nada que creas importante, no lo leas. Pero insisto: no dice nada que se haya escrito y/o publicado aún. Todos los personajes y lugares pertenecen a G.R.R. Martin.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Capítulo 12


RHAEGAR
            A Elia parecían no importarle las molestias del embarazo: deseaba con toda su alma salir de la Fortaleza Roja y distraerse y Rhaegar lo sabía. La invitación al  torneo de Lord Whent fue una excusa perfecta para abandonar el encierro al que su estado la tenía sometida y por eso formaba parte del cortejo que acompañaba a Rhaegar. También se unió al viaje Aerys, algo extraño ya que llevaba años sin salir de Desembarco del Rey. Rhaegar sospechaba que su padre había decidido ir a Harrenhal porque Varys le informó del contenido de la extraña nota que recibió hacía unas semanas. No sabía quién la había mandado y estaba expectante por el misterioso encuentro. ¿Y si era una trampa? Debía ser cauto en ese aspecto.

            La comitiva ya había llegado al castillo, que presentaba un aspecto imponente a pesar de tener algunas partes en estado ruinoso. Las cinco torres se recortaban contra el cielo azul claro. Su color oscuro le daban un aspecto fantasmagórico y hacían a Rhaegar pensar en el momento en el que su antepasado Aegon el Conquistador prácticamente destruyó la fortaleza con el fuego de su dragón, Balerion. Reyes poderosos de épocas pasadas. La melancolía empezaba a adueñarse de él y en su cabeza empezaron a surgir notas musicales para interpretar con su arpa…
            A las puertas del edificio estaban esperando Lord Whent y su esposa. Con una reverencia saludó al rey Aerys y al resto de la familia real. Los criados se ocuparon de los caballos y equipajes, así que los Targaryen pasaron al interior para ser acomodados en sus habitaciones. Elia y Rhaegar entraron en la estancia reservada para ambos. La mujer estaba agotada por el viaje, así que prefirió quedarse descansando después de tomar un baño. Rhaegar pensó dar un paseo por Harrenhal, pero su cabello blanco podía delatarle, así que optó por salir con la cabeza cubierta para pasar desapercibido.

            Una vez que dejó a Elia tranquilamente durmiendo, salió a la calle. El movimiento era notable y la cantidad de gente se había multiplicado, atraída por la celebración del torneo. Muchos mercaderes intentaban hacer negocio entre el gentío que se había desplazado con la ilusión de ver a su monarca en algún momento. Rhaegar no entendía cómo todavía existían súbditos capaces de amar a un rey loco como Aerys, aunque la misiva anónima demostraba que había partidarios de que Rhaegar subiera ya al Trono de Hierro. Desde que su padre empezara a sufrir delirios, el príncipe se había estado intercambiando mensajes con Aemon Targaryen, Maestre en la Guardia de la Noche y tío bisabuelo suyo. En ellos le preguntaba si él era “El Príncipe que fue Prometido”, Azor Ahai, el que renacería para luchar contra la oscuridad cuando ésta volviese. Aemon aseguraba que sí, pero ahora que Elia estaba embarazada parecía claro que ese bebé estaba llamado a convertirse en el Príncipe esperado. Rhaegar sólo deseaba que las extravagancias de su padre no llevaran a los Targaryen a la desgracia. Algo en su interior le decía que el fin de la dinastía de los dragones estaba cerca.

3 comentarios:

  1. Pues ya han llegado todos! Ahora... a la espera de ese primer encuentro, estoy deseando ver como sucede.

    ResponderEliminar
  2. Vaya, cuantos personajes, parece que algo importante va a pasar, voy a leer el otro ya mismo, gracias Athena. ^^

    ResponderEliminar